“Las empresas están en su derecho de pedir a la Diputación que asuma el coste de las vacaciones fiscales”

Entrevista al diputado de Hacienda y Finanzas de la Diputación Foral de Gipuzkoa, Pello Gonzalez, hoy domingo en El Diario Vasco. Por David Taberna. Foto: Usoz

Preocupado porque, pese al aumento de la recaudación, los últimos datos no están siendo nada «halagüeños», Pello González (Hamaikabat) discute los mensajes que hablan de una consolidación de la recuperación económica. «La recuperación no termina de despegar», advierte. En esta entrevista, el diputado de Hacienda rompe el silencio y, por qué no, también el misterio que durante muchos años ha rodeado un culebrón que esta semana ha vuelto a salir a la luz: las ayudas fiscales concedidas a empresas vascas en los años 90 y consideradas después ilegales por la UE.

– ¿Cree que las diputaciones se han pasado de listas con la Comisión Europea en el culebrón de las vacaciones fiscales?

Durante un tiempo se tuvo la convicción de que había muchas posibilidades de ganar este asunto en los tribunales, por lo que se adoptó la estrategia de contemporizar la causa. Una vez que el tribunal falla con contundencia contra las diputaciones algunos hemos entendido que el camino correcto era ya no tanto pleitear con la comisión, sino ponernos de acuerdo en cómo arreglar este asunto. Lo cierto es que en la Comisión hay una percepción, y así nos lo han transmitido, de que se ha estado demorando la recuperación de las ayudas durante muchísimo tiempo, y ahora quiere actuar de una manera ejemplarizante contra nosotros.

– Da la sensación de que durante mucho tiempo las diputaciones adoptaron una actitud tipo ‘a mí Europa no me va a decir lo que tengo que hacer’.

– Se pensaba que dentro de ese ejercicio de soberanía fiscal no había cortapisas. También es verdad que la pequeñez que podemos suponer en Europa le hace más fácil cebarse en resoluciones negativas contra nosotros. Difícilmente un Estado como Francia o Alemania estaría hoy en día en esta tesitura. Gipuzkoa ya ha mostrado su disposición a llegar a un acuerdo. El problema es que la permeabilidad de la Comisión ha sido cero y no hemos sabido interpretar conjuntamente cómo se ejecuta esa recuperación. Pongo un ejemplo: cuando nosotros fuimos a Bruselas a acordar la recuperación de las ayudas, les planteamos que las empresas se acogieran a otras ayudas regionales que en su día existían. La respuesta no fue ni sí ni no, sino ‘liquiden y ya veremos’.

– En principio la Comisión cree que las diputaciones aún no habrían recuperado 587 millones de 69 empresas vascas.

– Hasta ahora solo teníamos un documento que Joaquín Almunia nos envió a petición de Gipuzkoa y ciertamente las cantidades que ahora aparecen son mucho mayores. Nuevamente la paradoja es mayor, ni coinciden los números de esos borradores de la Comisión ni sabemos la división por territorios.

– ¿Entonces no sabe lo que le corresponde a Gipuzkoa?

– No. Tenemos un borrador que se nos trasladó en la reunión con la Comisión en mayo y habla de 37 millones para Gipuzkoa. Pero hay dudas ya que desde ahí hasta los 587 la distancia es tremenda.

– Parece que Gipuzkoa está yendo por libre a la hora de buscar una actitud conciliadora con Europa frente a la postura frentista de Álava y Vizcaya. ¿Se va a intentar buscar una acción común?

– El problema es común y dentro de las pocas posibilidades de actuación que tenemos habría que buscar una postura unitaria.

– ¿Por qué son las empresas las que deben pagar si se acogieron a una normativa legal? ¿No deberían hacerlo las diputaciones?

-Está claro que la empresa no hizo nada que no debiera. Por tanto, podría ocurrir que las empresas reclamaran a la Diputación esos importes. Estarían en su derecho.

– ¿Hay alguna empresa que se lo ha planteado?

– Ha habido alguna reclamación ante el Tribunal Económico Administrativo, y hasta el momento ha habido buena entente. Hemos estado con cada empresa varias veces. Ahora bien, nosotros creíamos que ya habíamos cumplido al 100% el requerimiento de la Comisión.

– ¿Hay riesgo de que alguna empresa cierre si tiene que devolver el dinero?

– Si dividimos 587 millones entre 69 sale a 8,5 millones por empresa. Imagínese lo que supondría eso en el momento actual para una compañía.

– Si llega la multa, ¿quién debería pagarla?

– Las diputaciones ya hemos insistido a Europa que en algunos casos recuperar las ayudas es imposible porque algunas empresas han desaparecido, pero la Comisión nos contesta que no es su problema y que si alguna tiene que cerrar deberá hacerlo porque en su día disfrutó de unas ventajas competitivas que no tuvieron otras. La frialdad de Europa fue absoluta. La multa diaria la pagarían las diputaciones y la cantidad a recuperar las empresas. Así lo dice la UE.

– Cambiemos radicalmente de tema. Parece que el aumento de la recaudación se está ralentizando y el INE acaba de advertir que el consumo se ha frenado por la subida del IVA. ¿Qué nos espera?

– Me gustaría dar una versión positiva. El peor tiempo ha pasado, pero ahora nos topamos con los altibajos típicos de una muy lenta recuperación. A día de hoy, la recaudación bruta está siendo un 3,6% superior a la del año pasado, lo que supone en líquido un aumento del 10% que nos puede llevar a pensar en cumplir el objetivo de déficit cero a cierre del año. Pero si explotamos las cifras vemos que los datos no son nada halagüeños. Mientras que el IRPF ha estado creciendo en los últimos meses a un 6%, lo que consolida la situación del empleo, en el caso del IVA la coyuntura cambia completamente.

– Según el INE, a peor.

– Antes de la subida del IVA en julio hubo un anticipo de las compras, pero desde julio los ingresos brutos por IVA han caído en Gipuzkoa un 2% con respecto al año pasado, que fue un ejercicio muy malo. Esto nos corrobora lo que en su día dijimos algunos, que subir el IVA a todo el mundo no era justo y que además frenaba la incipiente recuperación.

– ¿Cómo sabe que el frenazo del consumo es por la subida del IVA y no por la propia coyuntura económica o por las medidas de ajuste y recorte de sueldo a funcionarios?

– Ciertamente es un cúmulo de todo. Las consolidaciones fiscales y la bajada de sueldo a funcionarios han tenido que ver. La incertidumbre económica influye, y veremos cómo se comporta el consumo en Navidad. Yo no pierdo ojo a esa caída del 20% de las devoluciones del IVA de las empresas, lo que indica que no están haciendo compras y que no prevén un aumento de la producción.

– Por aclarar un poco los mensajes. El Gobierno Vasco habla de consolidación del crecimiento. ¿Usted no iría tan lejos?

– Yo creo que no terminamos de despegar. Donde algunos ven una V o una W nosotros vemos una L con una subida lentísima. En cualquier caso hay que felicitarse de que con un crecimiento cero la empresa guipuzcoana esté sujetando el empleo.

– Si miramos a Irlanda o a Portugal, ¿nos espera un 2011 para echarse a temblar?

– He visto una actitud bastante decidida de la UE para que no caigan. La situación de Irlanda y Portugal no tiene nada que ver con la de España.

– Enmarcado en la lucha contra el fraude, Hacienda impide que doce de las 35 actividades profesionales que podían tributar por módulos lo sigan haciendo en 2011. ¿Qué se guarda para el final de legislatura?

– Seguimos trabajando para tener más controlados a aquellos profesionales que se pueden hacer su propia nómina. No podemos admitir que una persona pague sus impuestos mientras otras no lo hacen. Lo cierto es que en la batalla contra el fraude hemos sido agresivos. La ética nos obliga a ello. Los datos están ahí. En la legislatura vamos a aflorar más de mil millones de euros. Todo un hito. Afloramos dos veces y media más de deuda que nuestros vecinos.

– Primero fue Adegi, luego Elkargi y ahora la Cámara. ¿Qué opina de los movimientos que está llevando a cabo su nuevo presidente, Pedro Esnaola, y que podrían acabar con la salida forzada de su número dos? De nuevo, el tejido empresarial guipuzcoano, sorprendido.

– Las conversaciones que había mantenido con Pedro Esnaola y Agustín Eizaguirre hablaban de trabajo conjunto. Leer en la prensa los cambios traumáticos que parece se van a dar ha sido una sorpresa. Como responsable público me preocupa este tipo de inestabilidad. La Diputación no está en la Ejecutiva de la Cámara pero pedimos sensatez. Ambas personas pueden ser válidas para el proyecto de la Cámara, y será ella la que decida cómo vehiculizar sus planes de acción. En todo caso, en momentos de incertidumbre lo que toca es sosiego, mirarnos todos a la cara y ver qué podemos aportar por el bien de la institución. Espero que la sangre no llegue al río y haya un entendimiento entre el presidente y el resto de miembros de la Cámara.